Definamos la autoestima como el sentimiento de aceptación y amor hacia si mismo, que va unido al sentimiento de competencia y valía personal, que le ha inculcado al ser humano la sociedad en que vivimos.
El concepto y la visión que tiene un persona de sí misma, no es algo que se herede genéticamente, sino que lo aprende del entorno que le rodea. Esto ocurre mediante la valoración que hace la persona de su comportamiento, evaluando y retro alimentándose permanentemente de acuerdo a los patrones de autoestima y valoración de la persona que ha aprendido del medio que le rodea.
Con el transcurso del tiempo la persona va asimilando e interiorizando de la opinión que cree que los demás tienen respecto a ella, en el caso de la autoestima baja se transforma en un círculo vicioso, ya que la persona no se muestra como es, inhibiendo su comportamiento, lo cual incide en la visión y percepción del entorno.
La importancia de la autoestima está en que regula el comportamiento de las personas, y éste dependerá de si el autoestima de la persona es baja o alta, en el caso de ser alta, esto se traduce en que le impulsa a actuar de una manera positiva, a seguir adelante frente a los obstáculos que encuentre, motivándose a conseguir los objetivos que se plantea en la vida.
Las personas quienes tienen una alta autoestima, se cuidan y respetan a sí mismas, reconociendo su propia dignidad y valor. Por el contrario, las que tienen una baja autoestima se valoran poco y se sitúan por debajo de los demás.
Siendo de vital importancia, el autoconocimiento, y el desarrollo personal, lo que permite que las personas vayan mejorando, corrigiendo sus defectos, cambiando patrones de comportamiento adquirido que le causan trastornos, siendo muy importante el que la persona esté dispuesta a conocerse, para saber primero que hay, para luego determinar que pudiera estar mal, para ser modificado y luego estar dispuesta a enfrentarse para resolver adecuadamente aquellos defectos que le causan trastornos en su vida.
Características de las personas con alta autoestima
- Superan sus problemas o dificultades personales.
- Afronta los nuevos retos con optimismo, intentando superar el miedo y asumiendo responsabilidades
- Se comunican con facilidad y les satisfacen las relaciones sociales, valoran la amistad y tienen iniciativa para dirigirse a la gente.
- No necesitan de la aprobación de los demás, no se creen ni mejor ni peor que nadie.
Las personas tienen que conocer sus virtudes, sus defectos, sus intereses, sus habilidades y experiencias a la perfección, para sacar así, el máximo partido de ellas.
La aceptación de si mismo es favorable y esencial en el éxito de las personas, en todos los ámbitos, laboral, social, familiar, y las personas por lo general, no le dan la adecuada importancia que el autoestima, el desarrollo personal, el autoconocimiento tienen en su realización y felicidad.
Características de las personas con baja autoestima
- Falta de credibilidad en sí mismos, inseguridad
- Atribuir a causas internas las dificultades, incrementando las justificaciones personales.
- Bajo rendimiento, desconocimiento de sus habilidades y potencialidades.
- No se alcanzan las metas propuestas.
- Falta de habilidades sociales adecuadas para resolver situaciones conflictivas (personas sumisas o muy agresivas)
- Incremento de los temores, especialmente del rechazo social, lo que se traduce, en inhibición para participar activamente en las situaciones.
No siempre las personas más cualificadas (títulos o notas) obtienen los empleos, o son exitosos, sino aquellas que están más equilibradas y han desarrollado una buena dosis de alta autoestima, lo que les permite enfrentar nuevos desafíos, atreviéndose a cometer errores, y a aprender de ellos, produciendo la confianza en su entorno, que pondrá lo mejor de sí, para desarrollar las funciones encomendadas.
¿Cómo mejorar la autoestima ?
Lo primordial y necesario es saberse quien es, conocer sus virtudes, sus defectos, sus habilidades, aprender de sus experiencias, saber y reconocer cómo funcionan las personas, en las diversas circunstancias y obstáculos que se le presentan en la vida.
El saber y reconocer las fortalezas, los aspectos positivos de la persona y cuáles son sus limitaciones, le permitirán disminuir en forma drástica que su autoestima dependa de la valoración externa, disminuyendo también el grado de frustración, ya que estando conciente de las limitaciones, las personas toman compromisos de acuerdo a sus reales alcances, traduciéndose en casi sólo resultados exitosos.
Partiendo del autoconocimiento, las personas pasan al desarrollo personal, ya que una vez que se reconoce y se valora lo que hay dentro de la personalidad de la ellas, pueden entonces estar en condiciones de decidir los aspectos que ellas desean mejorar, cambiar y reforzar.
Lo importante de practicar el autoconocimiento, el desarrollo personal, es que prontamente las personas realizan una valoración y un análisis de si mismas, bastante realista, descubriendo que hay determinadas características que no podrá cambiar, las que podrá aceptar, aprendiendo a convivir, valorar, sacándoles el mejor partido, y ver los aspectos positivos, de las mismas. (ejemplos: altura, edad, por lo general características físicas).
El primer paso para cambiar y mejorar el autoestima, está relacionado con pasar de la idea a la acción (que es lo más difícil). Una vez que uno se decide a realizar el cambio hay que aplicar voluntad, perseverancia y constancia, por eso es recomendable ponerse en manos de personas entrenadas en ello, para que nos ayude a desarrollar un plan de acción realista, con proyección en el tiempo, un “Life Coaching” un “Entrenamiento de Vida”, y con una persona que elabore un plan de acuerdo para resolver sus necesidades, teniendo presente que las personas aprenden de maneras distintas, dependiendo de sus características y de sus vivencias.
Esta necesidad, hace resurgir el milenario concepto del Maestro, que ha logrado la sabiduría a partir del conocimiento interior como en la tradición oriental conocida como el Zen que es la base de todas las artes marciales (Kung Fu – Monjes Shaolin) y la disciplina de los conocidos guerreros Samurai en Japón.
La tendencia mundial para el desarrollo personal y el trabajo del autoestima está siendo facilitado por los denominados “Life Coach”, (Entrenador de Vida) que a través de su propio crecimiento personal, tiene la facultad de orientar y facilitar la tarea del desarrollo personal, optimizando los procesos y mirando de forma objetiva e integral los diversos aspectos de ella y tomando al ser humano en forma integral, desarrollando la inteligencia emocional y espiritual.
Consejos prácticos para mejorar la autoestima:
- Entender que el “conocerse, enfrentarse, aceptarse y amarse a si mismos”, está en las manos de cada persona y no en las de los demás, entendiendo que nadie más puede hacer esos cambios, o desarrollar su personalidad, espíritu.
- Los patrones y conceptos con los que las personas fueron criadas, son las que hoy fijan los patrones de comportamiento, por lo que es necesario, cambiarlos en su propia cabeza, desarrollando además aspectos, poco valorados hasta ahora en el entorno donde ellas se desenvuelven, tales como la Inteligencias emocional y espiritual.
- Aceptarse primero tal y como se es, con sus cualidades y defectos. Entendiendo que todas las personas tienen defectos, que nadie es perfecto, y el actuar de la mayoría de las personas es pretender serlo, ya que lo que le ha inculcado el entorno en que creció, es que los errores son penalizados y mal valorados, por lo que intenta ocultarlos, inclusive negándose a aceptarlos pretendiendo que de esa manera desaparecerán. Es necesario, destacar que la única forma de aprendizaje que posee el ser humano es a través del error, prueba y error, y esto ocurre hasta el día en que muere.
- Desarrollar el sentido del humor, aprender a reírse de si mismos, basados en el párrafo anterior, sabiendo que muchas veces la prueba fue una tontera, que de otra manera, si no se hubiese atrevido, no podría haber aprendido de ese error, y con ello no darle tanta importancia a cosas que no la tienen, ni a los comentarios de los demás. En la mayoría de las ocasiones las personas se hacen grandes montañas de problemas que en realidad no lo son, y se ahogan en un vaso de agua, además, la gente no está siempre pendiente de lo que hacen o dicen las otras ya que están demasiado ocupadas en si mismas y sus propios problemas de autoestima, y que las personas se sientan perseguidas por ello, sólo es producto de sus procesos mentales, imaginación y patrones de auto evaluación.
- Centrarse en si mismo, prestar más atención a todos sus actos, desarrollando la conciencia permanente, dedicando un tiempo diario a la propia auto evaluación e introspección, hacerse el tiempo a diario para desarrollar actividades que le haga feliz y le satisfaga, de esa manera no esperará a mañana o a jubilar para serlo y poco a poco aprenderá a disfrutar de toda y cada una de las cosas que realice.
- No temer a tomar responsabilidades o a tomar decisiones, si algo sale mal, aprender de sus errores, teniendo el coraje para volver a intentarlo y seguir a prendiendo. Es parte del proceso de aprendizaje del ser humano, siendo la única forma de aprender, cambiando el foco, aprendiendo a ver la cara positiva de los fracasos y los errores, siendo esto parte de un proceso evolutivo, donde se van cerrando y superando etapas, y que luego resultó ser que cuando se cerró una puerta, se abrieron nuevas oportunidades, mejores que las anteriores, que de no haberse cerrado, jamás se hubiera incursionado en nuevos aspectos, situaciones, relaciones o actividades.
Albert Einstein definió la Estupidez Humana como:
“Seguir haciendo lo mismo y esperar Resultados Distintos”.